22 Jun Estoy embarazada ¿Puedo hacer Pilates?
El embarazo es un proceso complejo en el cual intervienen multitud de factores, fundamentalmente hormonales, que provocan cambios significativos en el cuerpo de la mujer.
Así que, antes de empezar a hacer pilates estando embarazada…
- Si acabas de conocer que está embarazada, quien primero debe asesorarte es la matrona del centro de salud, así como por el médico especialista en ginecología del dentro de especialidades u hospital que corresponda.
- En principio la práctica de Pilates, no supone ningún problema para la mujer embarazada, salvo que previamente presentase otro problema de salud, que ya de por si lo contraindicase, por ejemplo: Patologías en fase aguda: artritis reumatoide, contractura en músculos del suelo pélvico, etc.. Cabe recordar que es interesante, antes del comienzo de una nueva actividad física, la conveniencia de realizarse un chequeo básico, por parte del médico de atención primaria o de alguna mutua aseguradora (si se posee).
- Es importante remarcar la participación de profesionales sanitarios durante todo el embarazo, existen infinidad de pseudo-profesionales que aprovechan ciertas vulnerabilidades durante este proceso para sacar tajada, es por ello que el fisioterapeuta es uno de los profesionales indicados para el seguimiento de la actividad física, así como para la supervisión de ciertos problemas a nivel musculoesqueletico (lumbalgia, ciática, dorsalgia, edema en MMII, etc.) que pudiesen aparecer a lo largo del embarazo. Las sesiones de Pilates dirigidas por un fisioterapeuta en grupos reducidos permiten individualizar y supervisar de manera más específica las sesiones de pilates a los pacientes
La única recomendación relativa con respecto al embarazo, es aplazar al segundo trimestre el comienzo de la actividad si no se ha practicado Pilates previamente por un periodo superior a los cuatro meses antes del momento de la gestación, simplemente es una precaución.
Durante los primeros meses del embarazo, es conveniente el incremento de la actividad física, para mejorar el estado físico general y que la mejoría en la calidad del tono muscular para facilitar la adaptación del organismo a los diferentes cambios que van a ocurrir como el desplazamiento del centro de gravedad, aumento de peso y la diferencias en el metabolismo.
Beneficios del Pilates
En el segundo trimestre, es cuando es realmente interesante la práctica de actividad física regular, en este periodo el cuerpo femenino se empieza a adaptar, fundamentalmente el cambio del centro de gravedad hacia atrás, y se convierte en muy beneficioso el aprender a controlar la musculatura abdominal y lumbar, por el ensanchamiento del vientre que se producirá a lo largo del tercer trimestre y donde la musculatura abdominal juega un papel diferente del habitual. La musculatura lumbar se convierte en único elemento estabilizador del tronco y es imperativo que se encuentre con buena calidad para evitar posibles lesiones o dolores por sobrecarga.
El aprendizaje de los tiempos respiratorios a través de la respiración diafragmática también será muy útil de cara al momento del parto, favoreciendo el control de los pujos y llegando a reducir el tiempo del expulsivo y con menores lesiones a nivel de suelo pélvico.
El entrenamiento del suelo pélvico mejora su tono muscular sin reducir su elasticidad. Está demostrado que ejercitar los músculos del suelo pélvico durante el embarazo reduce la incidencia de episiotomías y lesiones de los músculos del suelo pélvico durante el parto.
Conclusión
En definitiva, la práctica de Pilates es una actividad dirigida muy interesante a la mujer actual que por falta de tiempo y motivación para realizar otras actividades necesita mejorar su estado físico durante el embarazo, para poder disfrutar de este proceso con las mínimas molestias.
Pilates mejora músculos específicos que reducen las molestias más habituales durante el embarazo (lumbalgia, ciática, dorsalgia) y posparto (incontinencia urinaria, disfunciones sexuales.
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